La comunidad de la renovada sede principal del Antonio Reyes Umaña celebró que la administración de la alcaldesa Johana Aranda consiguiera terminar la obra y entregar las nuevas instalaciones, que imponentes se destacan en el barrio Las Brisas, en la comuna 11, zona Sur de la Capital Musical, beneficiando 1.300 estudiantes.
“El Antonio Reyes Umaña tiene algo especial y es que hemos logrado habilitar para los más pequeños jardín, prejardín, transición y hoy inauguramos, en el marco de la entrega de toda la institución educativa, un gimnasio dónde se fortalece la educación a la primera infancia”, afirmó la mandataria.
Las modernas instalaciones se entregan también con mobiliario nuevo, como pupitres, tableros, muebles de almacenamiento, más de 20 computadores para la sala de tecnología, así como menaje y equipos para la cocina y comedor entregados por parte de la Administración Municipal para la entrega del Programa de Alimentación Escolar.
“Nos entregan tres bloques, 18 aulas, un bloque administrativo, sala de profesores, oficinas, una biblioteca, laboratorio polivalente, sala de tecnología, aula de ciencias naturales, un módulo de primaria, cocina y comedor, uno de los más grandes de Ibagué, podemos atender mil estudiantes simultáneamente, estamos muy contentos”, indicó Harold Alberto Oviedo, rector y egresado de la institución.
Con una inversión superior a los $17.500 millones, el establecimiento se construyó gracias a un convenio de la Alcaldía con el Ministerio de Educación Nacional, ejecutado por el Fondo de Financiamiento para la Infraestructura Educativa.
“Felicitarlos por esta institución que quedó muy linda e invitarlos al cuidado de la misma, porque no es una inversión solo local y nacional sino de toda la comunidad, entonces aprovecharlo de la mejor manera y comprometernos con la educación a nivel municipal y nacional”, agregó David Saavedra, delegado del Ministerio de Educación Nacional.
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Cada día el ser humano comete mínimo cinco errores: pagamos un almuerzo o compramos baratijas con tarjetas de crédito y a seis o doce meses; caemos en la trampa de la publicidad engañosa; nos dejamos llevar por las etiquetas de mercancía extranjera hecha en nuestro país, etc. Luis Hernando Granada, el autor de esta obra, nos relata cientos de trampas y engaños para evitar volver a caer.
